El Mundo en 2100: Inteligencia artificial y Transhumanismo.

A finales del siglo XXI, la especie dominante en el planeta Tierra ya no eran los Homo Sapiens sino que fueron los Homo Cyberneticus… En este relato descubriremos un proceso histórico que podría llevar a la decadencia del género humano actual. Aparecen nuevas formas de inteligencia y desarrollos genéticos que darán lugar una nueva humanidad transhumana.

Estudiaremos el proceso de transformación de las estructuras económicas, la situacion medio ambiental, y las estructuras culturales que ampararían estos cambios… y las resistencias a este cambio tan sustancial.

LA VISIÓN

Espero que os haya gustado este relato con una descripción del futuro. Espero que sepáis ser indulgentes conmigo como siempre. Me parecía interesante plantearse un camino al futuro y concentrarme en los posibles efectos del desarrollo de las IA y sobre todo de la manipulación genética y el proceso del transhumanismo, que a mi modo de ver implica un riesgo cierto de que la especie humana tal y como la conocemos deje de ser la especie dominante del planeta.

Por si queda alguna duda, yo prefiero que el homo sapiens siga siendo la especie dominante aunque eso implique poner barreras a ciertas formas de desarrollo tecnológico. Creo que el primer deber de todos los humanos es asegurar la supervivencia de nuestra especie.

Dicho esto, añado que según tengo entendido en la civilización occidental hay cierta repulsión a la idea de que las maquinas se equiparen a los hombres… porque en el fondo compartimos una visión cultural humanista en la que el hombre es el centro y medida de todas las cosas, y además la idea profunda de que el hombre ha sido creado por Dios a su imagen y semejanza. La humanidad es poco menos que divina y la Tierra le pertenece. Según tengo entendido hay culturas como la japonesa en la que no existe ningún tabú respecto de la creación y convivencia, con autómatas, humanoides, robots o androides de cualquier tipo. En occidente tememos a robots como Terminator, mientras que en Japón admiran a robots como Mazinguer Z. Digo esto, porque temo que aunque en occidente no hubiese desarrollos en el sentido que he descrito en la ucronía, creo que algún lugar del mundo se comerá de la fruta prohibida y se harán desarrollos de IA, androides y humanoides de todo tipo.

Cuando pienso en una ucronía del pasado o del futuro, suelo pensar que hay 3 tipos de escenarios: el posible, el probable y el preferible. En general busco un escenario verosímil, asi que me decanto por los escenarios históricos probables. Cuando hablo del pasado, se sobreentiende que lo que no nombro debio de ir mas o menos parecido a como realmente fue… pero el futuro aun no esta escrito, asi que no esta tan claro que es lo mas probable. Además imaginar algo abre la posibilidad de que llegue a ser construido, asi que siempre siento mucha tentación de pensar en futuro deseables, mas alla de lo probable o lo posible…

Para esta ucronía, creo que hay una mezcla de elementos desagradables como la sumisión del homo sapiens ante su ocaso como especie, frente a la pujanza del Homo Cyberneticus … y hay cosas deseables como la reversión del cambio climático, la renta básica universal o el desarrollo tecnológico espacial. Por cierto que hay cosas que digo aunque me disgustan, como por ejemplo señalar que el 1% más rico de la humanidad es quien tiene los medios y todas las probabilidades de embarcarse en el proyecto transhumanista. Me imagino que serían estos los que tendrían la disposición y los recursos para convertir a sus hijos en superhombres.

La verdad es que la perspectiva de la subalternidad de Homo Sapiens y su potencial desaparición no me parecía un escenario muy deseable… Quizá podríamos asumir que homo sapiens se convertiría en la vieja especie del género Homo propia del planeta Tierra… al tiempo que todas las demás variedades surgidas por especiación tecnológica, serían las especies de Homo de otros planetas o adaptados a ecosistemas diferentes al terrícola. Lo malo es que en la tierra no dejarían de existir esas otras formas hibridas de humanidad que al tener capacidades superiores es probable que subalternizasen a los Homo Sapiens originarios.

Por cierto, que he dejado un final abierto, en el que el contacto con la civilización extraterrestre: puede desembocar en dos caminos principales… la cooperación o el conflicto con la civilización alienígena.

No querría cerrar este capítulo sin señalar que en este episodio describo como el desarrollo tecnológico reduce la necesidad de trabajo humano a un aporte marginal. El trabajo ha venido siendo el principal  medio de integración social desde la aparición de las sociedades productoras en el neolítico… y creo sinceramente que ese paradigma podría cambiar en cuestión de décadas por el explosivo avance tecnológico.

Cuando escucho que el trabajo dignifica, o que alguien debe buscarse un trabajo… pienso que estas frases están construidas con la mentalidad de una época ya pasada, en la que el trabajo era una condición necesaria para el mantenimiento de la sociedad. Hasta el siglo XX, la humanidad siempre ha necesitado de enormes cantidades de trabajo humano para asegurar la reproducción social. En el siglo XXI, esto ya no es verdad, ahora ya hay menos puestos de trabajo disponibles a nivel mundial, que personas empleables. Cada día que pasa son necesarias menores cantidades de personas para el trabajo. Incluso si todo el mundo fuese excepcionalmente laborioso y comprometido, no hay trabajo para todos… ni tampoco existe la posibilidad de crear nuevos trabajos para toda la población excedente. Simplemente hemos llegado a un punto en el que la producción es extremadamente eficaz y sobran personas trabajando. Con la tecnología disponible a principios del siglo XXI, y con la capacitación que tienen los trabajadores actuales, cada hora de trabajo actual es mas productiva que la suma de muchas horas de trabajo de un operario de hace 100 años… pero ante esta realidad las relaciones laborales siguen fosilizadas en los paradigmas de hace 100 años, y los trabajadores siguen trabajando unas 40 horas semanales. De las 40 horas semanales que trabajo un empleado actual, bastan unas cuantas horas para cubrir el coste de su salario, y el resto de horas trabajadas son beneficio para el consejo de administración de la empresa. Hace 100 años, un trabajador también  dedicaba 40 horas semanales al trabajo, pero su baja productividad respecto del presente, implicaban que muchas más horas de su trabajo semanal iban destinadas a financiar su salario… dicho en otros términos, la extracción de plusvalía del trabajador se ha hecho más intensiva con el tiempo… y como la tecnología también aumenta, está disparándose la cantidad de trabajadores expulsados del mercado laboral, y todos estos desempleados actúan como ejercito de trabajadores de reserva que siempre presionan a la baja en salarios y condiciones de trabajo de los que están empleados.

En resumen, que en el siglo XXI, es absurdo que sigamos trabajando 40 horas semanales, y que si lo hacemos es debido a que en las últimas décadas del siglo XX y principios del siglo XXI, las clases dominantes solo conocen la victoria y las clases subalternas se han acostumbrado a aplaudir orgullosas el dominio de sus amos… y por ese motivo seguiremos trabajando 40 horas semanales o más… aunque sea un anacronismo sin sentido a nivel civilizatorio.

Dicho esto, dejo caer algo sobre el mito de las pensiones. Es verdad que ya casi no nacen niños en occidente… y eso es un drama, pero por otros motivos, no por el pago de la pensiones. Otra vez es la productividad el factor explicativo: Hacían falta varios empleados a principios del siglo XX para generar excedente como para financiar la el salario, la plusvalía del patrón y los impuestos para pagar pensiones… pero a principios del siglo XXI, hacen falta muchos menos empleados y menos horas para producir una enorme riqueza con la que financiar las pensiones, los salarios y las plusvalías del patrón. No sobran pensionistas sino que falta redistribución de la riqueza que acaparan las elites. También sobra el desvío de esta riqueza fuera de la economía real del estado y las familias. Las empresas se deben a accionistas, bancos y fondos de inversión que en ultimo termino drenan riqueza real para alimentar la especulación financiera, los paraísos fiscales o a depósitos bancarios… y estos bancos utilizan esa liquidez como garantía real para generar enormes cantidades de dinero en créditos, que retroalimentan burbujas especulativas, o alimentan la gran espiral autodestructiva de la economía basada en la deuda… Disculpad la digresión, pero en resumen creo que la jornada laboral debería ser mas corta en el siglo XXI, y las pensiones e pueden pagar sobradamente… y si no hay dinero es porque no hay redistribución de riqueza, desde las elites sociales a nivel mundial respecto de las masas de humanos que pasas su vida por este mundo sin tener otra cosas que su fuerza de trabajo para ganarse la vida… y de vuelta al episodio, veo que este 1% esta acumulando tanta riqueza y poder que no me sorprenderían que se paguen una mejora genética, que los convierta directamente en sobrehumanos.

En serio, disculpad la digresión… pero es que me da pena imaginar la inmensa riqueza que hoy se produce en el mundo y lo injustamente que se administra… con la lógica de todos contra todos, y sálvese quien pueda… al final veo que colapsaremos como especie. El género humano es realmente fuerte cuando coopera.

Un abrazo a todos y gracias por leer un relato de Historia Ficción.

David Rico
Creador del podcast Historia Ficción

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